domingo, 15 de mayo de 2011

Libertad


Donde veo mi libertad,
mis tristezas y mis ansias
y el silencio haciendo
ondas en el agua.

Aquí esperando lo inesperado,
lo imposible,
me encuentro sentada
triste y desplomada.

Porque estás y no estás
y extraño tu voz juvenil
y alocada,
y el movimiento de
tus manos ágil y
desbocado,
y tu risa libre
y despejada de los años.

Espero en un tiempo virtual
presencial e inevitable
que vengas con tu caminar
suelto, irreverente, adolescente,
a hablar conmigo de pasados
presentes y de futuros
inexistentes.

Y ésta loca alma mía
sufrida y desgastada,
aguarda, siempre aguarda…

Graciela Pera
15-5-2011

1 comentario:

Anónimo dijo...

y ese momento llegará,querida amiga,aquí o en otro lugar,volver a ver a quien uno tanto amó,es inevitable...Bellísimo el poema,un beso,Patricia