domingo, 19 de septiembre de 2010

La Noche de los Lápices




Se conoce con el nombre de La Noche de los Lápices al secuestro realizado el 16 de septiembre de 1976, (34 años) a diez adolescentes de colegios secundarios en La Plata, cuando luchaban por el boleto estudiantil que actualmente gracias a ésa lucha gozan los jóvenes. Estos chicos eran integrantes de la UES, Unión de Estudiantes Secundarios, organización fundada por el Gringo Caretti, en 1974, nacido el 17 de abril de 1954 en Capital Federal, líder natural de los estudiantes secundarios, y militante montonero.
El 24 de marzo de 1976 se produjo el golpe de Estado, cuyo gobierno de facto estaba compuesto por Videla, Massera y Agosti. Dicha asunción no fue casual y a mi entender tan a la fuerza (aunque evidentemente luego se desmadró) ya que surgió a partir de un decreto firmado durante un gobierno democrático el 2772/75 por Ruckauf, Cafiero, Robledo y Luder (fuente Eduardo Tagliaferro). Este último para la fecha en la que se firmó el decreto se encontraba ejerciendo el cargo de Presidente de la Nación, por ser Presidente Provisional del Senado ya que María Estela Martínez de Perón, a cargo de la presidencia al morir su esposo se encontraba fuera del país, recuerdo que con el regreso de Perón, en la presidencia de Cámpora se escuchaba la frase Cámpora al gobierno, Perón al Poder, cuando Perón muere allá por julio de 1975, pero casi un año antes, en el acto del primero de mayo de 1974 por el día del trabajo en Plaza de Mayo, se corta la relación entre Perón y los Montoneros cuando el primero los llama imberbes,.
HABLA PERON: "...Compañeros, deseo que antes de terminar estas palabras lleven a toda la clase trabajadora argentina el agradecimiento del gobierno por haber sostenido un pacto social que será salvador para toda la República...
CANTICOS EN RESPUESTA: ¡Conformes, conformes, conformes, general, conformes los gorilas, el pueblo va a luchar! - ¡Aserrín, aserrán, es el pueblo el que se va! (fuente Página 12).
También debemos recordar la triple AAA, Alianza Anticomunista Argentina, que comandaba José López Rega (el brujo) y secretario personal de Perón en su exilio en Puerta de Hierro, España. Esta organización intentaba repeler los ataques guerrilleros, la Ley del Talión, (ojo por ojo diente por diente).
Se le atribuye a la triple A varios hechos como el asesinato del padre villero Mugica el 7 de mayo de 1974, (fuente Yo soy Vargas, E. Guerrero).
Oscar Alende, cuenta que después de que Perón concluye su discurso y entra a la Casa de Gobierno, Alende le dice: "Pero, General, ¿qué pasó con la juventud?". "Bueno -le dice Perón-, de vez en cuando hay que darles un tirón de orejas a los jóvenes, pero no es nada." Y lo agarra a López Rega y le dice: "No quiero que ocurra absolutamente nada y usted es el responsable". Si Perón no le hubiese dicho eso a López Rega, nos esperaba una masacre... se repetía en la Facultad de Derecho la masacre de Ezeiza. Yo creo que Perón no conocía los movimientos de López Rega, pero sí podía conocer la tendencia de lo que estaba haciendo López Rega. Y si lo conocía no lo quiso ver, lo intuía pero no lo quería ver, (Juan Pablo Feinnman, Peronismo, Filosofía Política de una Obstinación Argentina). Con humildad me permito disentir con un intelectual como Feinmann, Perón a mi entender era muy inteligente, un estratega, descreo que no supiera del accionar de su secretario personal.
Retomando la muerte y desaparición de los estudiantes de La Plata, uno de los sobrevivientes Pablo Díaz, contó su sufrimiento y el de sus compañeros en el Pozo de Banfield, lugar en el cual se encontraban secuestrados y actualmente quieren dejarlo como la ESMA un espacio para la memoria, según un artículo del domingo 13 de septiembre de éste año del diario Tiempo Argentino. Como diría Feinmann ¿dónde está la verdad?, en el sentido que si bien es un horror la masacre que realizaron los militares y nada lo justifica, es de destacar que los jóvenes que murieron eran como carne de cañón, ya que Firmenich, Galimberti, Vaca Narvaja, también fueron indultados en su momento y salieron ilesos, arengando a los más jóvenes. También es un horror injustificable la muerte de Paula Lambruschini hija del vicealmirante Armando Lambruschini que se desempeñaba como Jefe del Estado Mayor General de la Armada y vivía con su familia en la calle Pacheco de Melo 1963, Piso 3º “B” de Capital Federal. En la madrugada del 1 de agosto de 1978 una poderosa explosión conmovió Barrio Norte, causando 2 muertos, 10 heridos y cuantiosos daños materiales en su domicilio y edificios aledaños. El hecho se lo adjudicó el Ejército Montonero por medio de un comunicado que decía: “Parte de Guerra” Pelotón Especial “Eva Perón. 1 de agosto de 1978; El día 31 de julio a las 23 horas, el Pelotón de Combate Especial “Eva Perón”, procedió a colocar una carga explosiva (de fabricación montonera), en el Barrio Norte, zona oligárquica donde vive el asesino y torturador vicealmirante Armando Lambruschini, Jefe del Estado Mayor y futuro Comandante en jefe de la Armada…El explosivo que detonó a la 1:40 en el mencionado barrio produjo la destrucción de la casa del asesino Lambruschini, la muerte de uno de sus custodios y graves heridas a otro. Lamentablemente también murieron la hija y una anciana, víctimas inocentes de esta guerra declarada por la dictadura y heroicamente enfrentada por nuestro pueblo.” (Fuente Diarios, Clarín, Nación, Crónica de la época), también soy yo misma la propia fuente, ése 1 de agosto me encontraba a tres cuadras, tenía diecinueve años, tres minutos antes había pasado por el lugar, así que sin haber intervenido nunca en política, venía de estudiar y salí ilesa por milagro. Me pregunto, ¿es necesaria la violencia? La muerte de los chicos de La Plata, la hija de Lambruschini traicionada por una amiga que era montonera y puso la bomba debajo de su cama, tenía tan sólo quince años. ¿Se puede justificar la muerte de los chicos de las Malvinas, enviados por un descarado borracho como Galtieri? ¿Qué nos pasa como sociedad?
¿Democracia? ¿Gobierno de Facto? En ambos había organizaciones paramilitares, a veces ignoradas realmente por la sociedad y en ocasiones esa misma sociedad (nosotros) mirando para otro lado. La frase del Dr. Favaloro reciclada emulando a San Martín me agrada: todos somos responsables, pero la responsabilidad mayor recae en la clase dirigentes, si viviera San Martín, caparía a lo paisano a varias generaciones de mandantes. Luego tendríamos que analizar que muchos acusaron al Dr. Favaloro de sacarse fotos con los militares genocidas y por último que San Martín admiraba al tirano Rosas (tirano para algunos).
Si nos remontamos a la Biblia, ¿quién puede arrojar la primera piedra?
Lamentablemente, el odio y la violencia seguirá generando víctimas en nuestro país, tal vez me equivoque…

Graciela Pera
16 de septiembre de 2010.